Desde California, USA, las cuerdas gruesas de The Ghost Inside debutan en nuestro país, cuyos fans desde hace tiempo anhelaban su llegada. Club Blondie será el terreno del hardcore moshpit este viernes 16 de febrero.

The Ghost Inside forma parte de la generación de la primera década del 2000, siendo parte importante de la fusión metal-hardcore. Luego de una primera etapa de cuatro años llamados “A Dying Dream” la banda pasa a ser The Ghost Inside de la mano de “Fury and the fallen ones” del año 2008, siendo su gran carta de presentación. Es dos años más tarde, luego del trato con Mediaskare Records, la banda lanza “Returners” en el año 2010. Desde este punto se instalan como referente importante del Metalcore.

En 2012, con “Get What You Give” debutan en el ranking Billboard, obteniendo el puesto número #88. Este álbum contó con nada menos que Jeremy McKinnon en la producción artística. Esta racha se extendió hasta el 2014 con otro Billboard, esta vez alcanzando el puesto #63. Trágicamente al año siguiente a este segundo suceso, el bus donde viajaba la banda con motivo de su tour, sufre una colisión de frente contra un camión, dejando a todos los chicos con heridas graves y la irremediable pérdida de una de las piernas de Andrew, baterista de la banda.

Finalmente, el quinteto conformado por Jonathan Vigil en voz, Zach Johnson, Chris Davis en guitarras, Jim Riley y Andrew Tkaczyk en la base rítmica, entra en un hiatos por casi cinco años. Durante todo este tiempo Tkaczyk se recupera y vuelve a la banda, con una pierna menos a cumplir la clásica y ardua tarea de llevar el ritmo.

Los chicos se encuentran próximos al lanzamiento de su álbum “Searching for Solace”, próximo larga duración, del cual ya se conoce el single “Wash it away”. Dicho álbum promete ser lanzado a mediados de abril del presente año. El show contará con el calentamiento de motores de la banda chilena “Chances”, quienes desde hace no mucho tiempo cuentan con la potente voz femenina de Tam Rivas.

The Ghost Inside tiene decenas de festivales a lo largo de su carrera, sin embargo no cabe duda que la euforia característica de los chilenos amantes del metal, dejará a los Californianos gratamente sorprendidos.

Escrito por Joaquín Espinoza Gutierrez.