El pasado viernes 16 de agosto, el Movistar Arena fue el epicentro de una noche que dejó huella. WOS, uno de los máximos exponentes del rap y la música urbana argentina, subió al escenario en el marco de su gira Descartable, presentando un show completamente acústico, acompañado de una banda en vivo. Este concierto marcó un nuevo capítulo en la carrera de WOS, en el que reafirma su transición hacia el rock sin dejar atrás sus raíces en el freestyle y el rap.
El setlist del concierto fue una montaña rusa emocional que combinó sus éxitos más conocidos con nuevas propuestas. Arrancó con Nuevas Coordenadas y el potente Descartable, ambos con arreglos acústicos que sumaron una capa de profundidad a sus ya intensas letras. WOS no tardó en encender al público con Niño Gordo Flaco y Canguro, donde la audiencia coreó al unísono cada palabra, demostrando la conexión que tiene con su música.
Una de las sorpresas de la noche fue la forma en que temas como Arrancármelo y Melón Vino cobraron una nueva vida en formato acústico. La interpretación más cruda y orgánica le dio un giro a las canciones, demostrando la versatilidad de WOS y su banda, que fusionaron su característico estilo urbano con el rock, en lo que claramente es parte de una evolución artística del cantante.
El concierto no solo fue un viaje por los éxitos de WOS, sino también una plataforma para seguir experimentando. Durante el show, el argentino se permitió jugar con improvisaciones de freestyle y una Beatbox Jam que electrificó al público, manteniendo viva la esencia que lo llevó al estrellato en sus días como campeón de batallas de freestyle.
Canciones como Luz Delito, Culpa y Caída Libre sonaron más introspectivas que nunca, mientras que temas como Cabezas Cromadas y Quemarás destilaron esa energía combativa y crítica que caracteriza al artista. Hacia el final del concierto, WOS regaló a sus seguidores momentos inolvidables con la interpretación de Púrpura, Melancolía y la conmovedora Alma Dinamita, canciones que, en formato acústico, resonaron aún más profundamente.
El cierre del show fue tan emotivo como impactante. Con La Cochería, WOS despidió una noche cargada de energía, mostrando que su viaje hacia nuevas coordenadas musicales apenas comienza. Este concierto no solo marcó una reestructuración sonora hacia el rock, sino que reafirmó su capacidad de conectar a través de la honestidad de sus letras y la fuerza de su interpretación.
En esta nueva etapa, WOS demuestra que no tiene miedo de explorar y de llevar su música a nuevas fronteras. Tras su histórica presentación en el estadio de Racing en Argentina, este show en el Movistar Arena fue un paso más en la consolidación de su evolución artística, dejando en claro que WOS no solo sigue siendo relevante en la escena urbana, sino que también tiene mucho que decir en el mundo del rock.
Te dejamos la galería fotográfica de la jornada.








Por Gonzalo Domingo.
Fotografías por Javier Vergara.