El pasado viernes 30 de agosto de 2024, el Movistar Arena de Santiago de Chile fue el epicentro de una noche cargada de energía, nostalgia y celebración. DJ BoBo, el icónico representante del eurodance de los años 90, hizo su tan esperado regreso a tierras chilenas tras 12 largos años de ausencia. Esta vez, en el marco de su más reciente gira, EVOLUT3ON, el artista suizo ofreció un espectáculo que será difícil de olvidar para los miles de fanáticos que llenaron el recinto.
La velada comenzó con la actuación de Mabel Gallegos, una joven promesa del pop nacional que, con su vibrante energía y talento, logró encender el ánimo de los asistentes. Mabel dejó el escenario con una ovación, dejando al público listo para la aparición de la leyenda del eurodance.
Puntualidad suiza, así se podría describir el inicio del show de DJ BoBo. A la hora exacta, las luces del Movistar Arena se apagaron, y en las pantallas gigantes apareció un video de los Backstreet Boys, quienes, con un toque de humor y complicidad, enviaron sus saludos y felicitaciones a DJ BoBo por el éxito de su gira. Este gesto marcó el tono de lo que sería una noche cargada de sorpresas y emociones.
El primer acorde resonó en el recinto y la magia comenzó. DJ BoBo apareció en el escenario principal, desatando la euforia del público. Desde el primer momento, el artista mostró una conexión genuina con sus fans, saludando, interactuando y agradeciendo el cariño que ha recibido a lo largo de los años. La puesta en escena fue simplemente espectacular: un despliegue de luces que acompañaba cada uno de sus movimientos, cambios de vestuario que le dieron dinamismo al show, y un setlist cuidadosamente seleccionado para llevar a los asistentes por un viaje musical a través de sus mayores éxitos.
El espectáculo no solo se destacó por la música, sino también por los efectos especiales que hicieron que cada canción fuera una experiencia única. Las llamas que surgían del segundo escenario, las serpentinas que dispararon desde el escenario principal y las chispas que llenaban el aire fueron solo algunas de las sorpresas que hicieron que el show fuera inolvidable. Pero uno de los momentos más impactantes de la noche fue cuando DJ BoBo dejó el escenario principal apareciendo en un escenario 360 ubicado en la parte trasera de la cancha y al bajarse, rodeado de su equipo de seguridad, caminó entre el público hacia el escenario principal. Este gesto no solo sorprendió a todos los presentes, sino que también reafirmó su cercanía con sus seguidores. A lo largo del recorrido, el artista se detuvo a saludar, abrazar y tomarse fotos con los fanáticos, quienes no podían creer la cercanía del ídolo.
El ambiente en el Movistar Arena se tornó eléctrico cuando comenzaron a sonar los primeros acordes de Somebody Dance With Me. La reacción del público fue inmediata: miles de personas se levantaron de sus asientos para cantar y bailar al unísono, creando una atmósfera de euforia que se sintió en cada rincón del recinto. DJ BoBo, visiblemente emocionado, agradeció el apoyo incondicional de sus fans, quienes han mantenido viva su música a lo largo de los años.
No faltaron los momentos de nostalgia, especialmente cuando en las pantallas se proyectó un emotivo video que repasó la historia del artista, desde sus humildes comienzos hasta su consolidación como una de las figuras más importantes del eurodance. En el video, DJ BoBo compartió anécdotas de sus giras, momentos icónicos de su carrera y lo agradecido que se siente por haber podido mantener su música y su estilo vivo durante tanto tiempo.
Un detalle que sin duda quedará grabado en la memoria de los asistentes fue la interpretación de Love Is The Price en español. DJ BoBo, con un acento cuidado, entonó cada palabra con una emoción palpable, logrando que el público respondiera con ovaciones y aplausos. Este gesto fue una muestra del respeto y cariño que el artista siente por su audiencia chilena, y fue recibido con gran entusiasmo por parte de todos los presentes.
El espectáculo continuó con un recorrido por otros grandes éxitos de su carrera, incluyendo What a Feeling, que desató una ola de nostalgia y emoción. La combinación de música, luces, efectos especiales y la energía inagotable de DJ BoBo hizo que cada canción fuera una experiencia única, creando una atmósfera de celebración que se mantuvo hasta el final del concierto.
DJ BoBo cerró la noche con un agradecimiento sincero a su público, prometiendo que esta no sería su última visita a Chile. El artista dejó el escenario entre aplausos y gritos de euforia, dejando a sus fans con una sensación de satisfacción y el corazón lleno de recuerdos.
La noche del 30 de agosto de 2024 en el Movistar Arena no fue solo un concierto; fue un viaje en el tiempo, un reencuentro con la música que marcó una época y una celebración de la carrera de un artista que, después de tantos años, sigue siendo un ícono del eurodance. DJ BoBo demostró una vez más por qué su música ha trascendido generaciones y por qué sigue siendo un nombre que resuena en los corazones de sus fans en todo el mundo. Santiago vivió una noche mágica, y DJ BoBo se aseguró de que cada uno de los presentes llevara consigo un recuerdo imborrable de esta velada inolvidable.
Te dejamos la galería fotográfica de la jornada.
Mabel Gallegos
Dj Bobo
Por Gonzalo Domingo.
Fotografías por Mauro Inostroza Carreño.