Chile se ha caracterizado a lo largo de sus años que ha sido tierra de dolores, enfrentamientos y violencia. Los diversos grupos de la población se han visto expuestos a presenciar de una u otra manera, los cambios sociales que la historia nos ha brindado. Tenemos Explosivos puso en la palestra la música de índole político en la escena pero no de una forma directa como lo hizo en su oportunidad 2X, Los Prisioneros o Fiskales Ad-Hok. Los cincos integrantes tomaron sus vivencias y experiencias en los escenarios y desplegaron la dialéctica bien planteada, transformándose en una obra cada interpretación.
Luego de las protestas estudiantiles que se produjeron entre los años 2010 y 2011, el escenario estaba propicio a abrir mentes. Tenemos Explosivos solamente tomó sus vivencias y nos brindó en su primer disco Derrumbe y Celebración, la carta de presentación a una banda contestaría pero muy inteligente a la hora de componer. Post-Hardcore puro y duro desde el principio hasta el final, dejando huellas magníficas como El Misterio de Kosovo, El Mejor Jugador del Juego, Mosaico de Pella, La Matanza de Corpus Christi, Antigona 404 y Cuerpo al Aire, entre otras.
El reconocimiento local fue inmediato y los cinco integrantes supieron abordar la fama underground para poder presentarse en diversos escenarios del país. Sin embargo, Eduardo su vocalista, da la decisión de dejar la banda, en el sentido de que se radicara en Alemania, todo esto con motivo de su trabajo. Los demás miembros de Tenemos Explosivos al principio tuvieron las intenciones de buscar otro vocalista pero se prefirió componer, crear y permitirse tener un vocalista a distancia. El punto álgido de Tenemos Explosivos es que es una banda que se presenta en ocasiones de forma anual dada la residencia en el extranjero de Eduardo, pero al momento de realizar fechas en Chile, el éxito es inmediato. Su fanaticada los acompaña a todas.
Es así que teniendo el material listo y dispuesto, incluyendo las letras y voces creadas en Alemania, se publica La Virgen de los Mataderos, un disco más directo políticamente pero conservando la poesía que los caracteriza. Esta entrega y como todos las del grupo, tiene un ideal primario que emana en todas las canciones. La placa se da en el contexto de la Dictadura Cívico Militar, el Golpe de Estado y las violaciones a los DD.HH. Canciones como Regreso a Casa, El Ciervo de Santa Margarita, Montreal, 400 negativos (inspirada en el crimen de Rodrigo Rojas de Negri), Autarquía, Joan Desteje la Noche y Oposculo de Tennessee son algunas piezas que envuelven la idea, en el sentido del sufrimiento, de la devastación y de la pérdida de tus cercanos y cercanas.
Tenemos Explosivos con dos discos tiene una base sólida para presentarse en festivales tales como el extinto MFest, como también en lugares alejados, como lo fue Punta Arenas. Sin animo de descansar, Victoria es el tercer larga duración que apunta ahora a la historia nacional reprimida pero desde una visión del lado íntimo, de la familia tal como lo dijo Eduardo en una presentación. Victoria es un nombre, es mención de ganador y una ciudad, demasiados significados que enlazan sentimientos muchas veces encontrados. Es de poner atención que la música se aleja del sonido crudo del Post-Hardcore y se relaciona más bien con lo melódico pero sin perder la fuerza en ningún momento. El mensaje es claro dentro de la consigna, tal como lo anuncia La Libertad Absoluta y del Terror en su introducción vía sample, recurso usado en varias canciones de la banda, dándole el toque original y claramente, apoyando su mensaje. Operación Colombo nos lleva a una densa propuesta y Coéforos suaviza la tristeza con el sonido de la trompeta. La familia es fundamental en el disco, tanto en su portada como la expresion que se emplea. Este disco además cuenta con colaboración Marcelo Nilo y en la homónima del disco con Victoria Cordero, artista nacional. Esta canción que le da el cierre al disco es creemos el mejor final que pudo tener y que ha tenido la discografía de la banda.
Los años pasan y también las vivencias del país. El estallido social y todo lo que ello trajo a la palestra, sirvió para que nuevamente el grupo santiaguino tomara sus instrumentos y compusiera Cortacalles, placa lanzada el año 2022. Este disco que muestra a un pájaro herido en su portada es el fiel reflejo del dolor humano, de la pena y la nostalgia. Aquí se toma nuevamente la política y la represión estatal pero en un contexto popular, con la música autoctona que se puede oír a lo lejos de los campos. No hay canciones semi flockloricas para nada pero si una interpretación más rockera y arraigada a las raíces propias de la música chilena, pero en pinceladas ejecutadas por los instrumentos. Canciones emblemas como San Borja, Lautaro, La Brigada, El Perro Volodia, Zanjon de la Aguada, Cultura de la Servidumbre y Cueca Sola nos hablan de lo propio de nosotros pero con la línea clara de la memoria, de esa que nos hace pensar día a día que el horror puede aún persistir si nosotros o nosotras cometemos los mismos errores.
Pocas presentaciones y grandes audiencias es lo que caracteriza a Tenemos Explosivos, un grupo ya de culto dentro de la música chilena más rockera pero no por su trayectoria que es corta en comparación a otras, sino con su propuesta lírica, eso que ocasiona en cada persona que los va a ver y canta todo pero todo lo que sale del alma de Eduardo. La composición de las canciones y las letras de Eduardo, que ocupa en cada disco temas identificables, estrofas que se repiten en varias canciones y dan un contexto que sólo el disco en su totalidad tiene, hace que cada entrega de la banda sea valiosa y original.
Tenemos Explosivos al fin podrá entregarnos su música en un escenario internacional de alta convocatoria. Eduardo, Juanjo, Rene, Alvaro y Matías estarán el sabado 16 de marzo en Lollapalooza Chile, dándole la más crítica visión del país pero reformulado en astuta interpretación.
