La periodista y bruja chilena nos guía en un viaje hacia el origen y la forma de ejercer magia
¿Alguna vez te has preguntado si existe la magia chilena? ¿Quiénes y cómo la practican? ¿Sabes dónde se esconde la hechicería y cómo atraerla? La periodista y locutora radial Isidora Urzúa emprendió una investigación para responder estas preguntas y el proceso la llevó a descubrir las raíces más profundas de la identidad y la cultura local. El resultado de esta búsqueda es lo que plasma en La invocación incorrecta, el primer libro de la conductora del podcast Caseritas.
“Para mÍ la magia era una realidad cuando era chica, antes de menstruar por primera vez. Sabía que tenía suerte, que estaba sostenida y que todo siempre iba a resultar. Después me pegaron las hormonas y ahí empecé a practicar la magia copiando a las películas”, cuenta la autora sobre sus primeros acercamientos a la magia.
Para Isidora, la magia está profundamente entrelazada con nuestra identidad nacional y nuestros ritmos. La invocación incorrecta propone que muchos de nuestros músicos son brujos y mucha de nuestra música es mágica. Respecto de esto la autora comenta que: “Las conversaciones, no solo con Joe Vasconcellos y Ernesto Holman, entrevistados en el libro, sino que con todos los músicos, productores, managers y artistas que he podido conocer y entrevistar a lo largo de mi carrera, me mostraban lo ligada que estaba la magia al ritmo y a la expresión musical. O sea, le he leído el tarot en vivo a Mon Laferte, a Camila Moreno, y a un montón de otros artistas fuera del aire”, revela. “Darnos cuenta que la música y los músicos, también son una forma de identidad espiritual, que son parte de la magia, es parte del despertar espiritual que quería mostrar en el libro”.
En esta publicación, que incluye testimonios personales, entrevistas y uno que otro conjuro, Isidora nos guía en un recorrido por nuestra identidad chilena originaria, llegando a la conclusión de que la magia chilena está durmiendo, y solo cuando nos atrevamos a llamar las montañas, valles, ríos, animales y plantas por su nombre verdadero, real, profundo, lograremos liberar todo el potencial de nuestra mágica identidad chilena.
“Las palabras son principales, porque son la vibración que identifica a un espíritu, se lo llama con su nombre verdadero, y se pide acceso a su poder. Si no decimos la palabra correcta, el espíritu no nos escucha, por lo tanto no podemos acceder a su vibración creadora“, explica la locutora. “Hacer la invocación correcta es primordial, por eso que es importante tener una constitución que realmente represente el espíritu de nuestra gente, por ejemplo”, agrega.